Realizo esta breve incursión en su mundo objetivo
tridimensional, para hacerles partícipes de una noticia que los alegrará mucho.
Buenos días a todos. Mi nombre es Melquisedek, y soy llamado
también por otros nombres, como el Anciano de los Días o el Maestro Sin Edad.
Realizo esta breve incursión en su mundo
objetivo tridimensional, para hacerles partícipes de una noticia que los
alegrará mucho.
Sé que muchos de ustedes están deseando que
su mundo, la Tierra ,
dé un salto evolutivo y se convierta en lo que se ha venido a llamar la Nueva Tierra. He venido a decirles que no sigan esperando,
porque en este mes de Diciembre actual (del 2013) ha comenzado ya el proceso de
traspaso de las antiguas energías involutivas hacia niveles de existencia de
más baja densidad, mientras que los seres humanos vivos están siendo
transformados a una vibración más elevada, y por el hecho de que sus electrones
se muevan a una velocidad mayor a la acostumbrada, impulsados por nuestra Voluntad
Mayor unida a su anhelo por pasar a una dimensión más elevada, la suma de ambos
produciré el inicio de su tan esperada Ascensión, que como he dicho, está
siendo activada a partir de este mes de Diciembre del año 2013.
Les digo esto por el simple hecho de que al
ser conscientes de ello, lograrán que su tránsito hacia una dimensión
inmediatamente superior sea un hecho de plasmación más efectiva y de un efecto
más rápido, que si ocurriera sin el previo conocimiento de al menos un mínimo
de masa crítica entre ustedes.
Cuando estén en soledad, en el silencio de
su recogimiento interno, traten de sentir como sus electrones han incrementado
su rata vibratoria y los están proyectando hacia un mundo nuevo, que irán
descubriendo poco a poco; tráiganlo al plano de la realidad con conciencia y
con conocimiento de causa.
¡El cambio se está manifestando ya! Siéntanlo así y háganselo suyo en conciencia
y con profunda alegría y agradecimiento hacia el Infinito y Eterno Ser que todo
lo puede y que todo lo sabe.
Felicitaciones y sabiendo lo que ahora saben
que sean felices, y que su dicha contagie a todos los seres humanos con los que
tomen contacto; no, no hace falta decirles nada – pero su alegría será
suficiente para ayudarlos a ellos también, aún sin decir nada.
Desde el Reino de Dios del cual procedo,
Melquisedek
Fuente:
Melquisedek
Canal:
Kris Won
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